En todo negocio se sabe la importancia que tiene una buena comunicación con el cliente para concretar una venta. Según estudios acerca de la comunicación humana, solo un 7% de la misma es verbal y el 93% restante está compuesto por la comunicación no verbal (gestos, miradas, postura corporal, entre otros).

Nuestro cuerpo dice más que las palabras. Saber leer los gestos y el lenguaje corporal nos brinda herramientas para detectar las emociones que están implicadas en cada interacción.

La concreción de una venta requiere estrategias que van más allá de lo que podamos decirle al cliente. Si mostramos una actitud de duda con nuestro cuerpo, difícilmente el cliente se sienta convencido con lo que le decimos.

Claro está que el lenguaje corporal no solo está determinado por la situación concreta de comunicación, sino también por las sensaciones y sentimientos en las que el sujeto se encuentra involucrado, las cuales dependen de su estado de ánimo, del ambiente, de su percepción del cuerpo, etc. Pero también, una parte importante de lo que transmitimos gestual y coporalmente tiene que ver con nuestro prejuicio frente al otro ser y con la imagen que en nuestra mente generamos de él, y viceversa.

Durante muchos años se le dio una importancia superflua a la oratoria para cerrar un negocio, pero hoy los expertos saben que para potenciarla primero debemos conocer cómo habla nuestro cuerpo.

Te contamos 4 tips fundamentales para potenciar tu lenguaje corporal:

Relajate y no encojas tus hombros

Encojer los hombros es una señal de falta de comprensión y denota inseguridad y falta de presencia. Esta señal muchas veces va acompañada por la rigidez del cuerpo, la cual comunica tensión y nerviosismo. Concentrate en tu eje y respirá para aquietarte y no darle una mala impresión a tus clientes. Mostrá seguridad relajando tus hombros y con una postura ergida. Si te sentís tenso es mejor que te tomes tu tiempo y salgas a tomar aire, sino se notará en tu cuerpo y tu actitud.

Prestá atención al gesto de tus cejas y tus manos

Levantar las cejas da un mensaje de incomodidas y falta de sinceridad. Un mensaje positivo acompañado por cejas levantadas se asocia con un doble discurso perjudicial a la hora de gestionar una venta. Procurá darles seguridad a tus clientes para que no duden de vos.

Tus manos también hablan…. Si tu pulgar señala mientras hablás darás un mensaje de dominio sobre el otro. Este gesto es leído negativamente ya que implica una sensación de agresividad. Al mismo tiempo, las palmas de tus manos transmitirán honestidad si están abiertas y desconfianza si permanecen cerradas durante la conversación.

Observá a tu cliente para comprender sus necesidades

La observación es fundamental en la comunicación. Así como debemos prestar atención a nuestros propios gestos, es necesario también que sepamos leer lo que el cliente expresa a través de su lenguaje no verbal.

Generá empatía y mantené el contacto visual

El contacto visual denota interés en la conversación. Si te están hablando y tu mirada se pierde, tus clientes pensarán que estás disperso y que no te interesa la conversación.

Generar empatía es fundamental. Un gesto de sonrisa al recibir a tus clientes será valorado y te acercará a ellos. También asentir con tu cabeza para reforzar tu imagen de interés y comprensión ante su necesidad, generará confianza y seguridad.

Una regla de oro es ser natural. Nunca exageres tus gestos ya que generarás una expresión falsa que provocará rechazo.